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El jarabe Tos Faes MelProtect se compone de una serie de ingredientes naturales que contribuyen a su eficacia. Entre ellos se incluyen la fructosa, agua purificada, miel, extracto seco de caléndula, extracto seco de malvavisco, extracto seco de llantén mayor, extracto seco de malva, extracto seco de própolis, extracto seco de bayas de saúco, ácido cítrico, aceite esencial de eucalipto, goma xantana, sorbato potásico y benzoato sódico. Los extractos herbales de llantén mayor, malva, malvavisco y caléndula contienen mucílagos de forma natural que ayudan a proteger la mucosa y a favorecer las funciones de las vías respiratorias altas. El aceite esencial de eucalipto le confiere al producto un agradable sabor balsámico.
Tos Faes MelProtect es un jarabe para la tos sabor miel eucalipto, que lubrica, hidrata, protege y alivia la irritación de las mucosas de las vías respiratorias altas. Su efecto emoliente calma la tos de cualquier tipo, seca o productiva y fluidifica el moco, lo que favorece su eliminación. Favorece con ello el bienestar fisiológico. Está indicado para calmar la tos, tanto la tos seca, como la tos productiva en adultos y niños mayores de 12 años.
Para utilizar el jarabe Tos Faes MelProtect, se debe agitar el frasco antes de usarlo, ya que por sus extractos herbales puede contener pequeñas partículas no disueltas, que no comprometen su calidad. Se recomienda tomar 15ml dos veces al día. Es importante utilizar el tapón dosificador y cerrar correctamente el envase después de su uso.
Es importante mantener el jarabe Tos Faes MelProtect fuera del alcance y de la vista de los niños. El producto debe almacenarse correctamente, en su envase original sin daños y en un lugar fresco y seco, alejado de la luz y de fuentes de calor. No se debe consumir después de la fecha de caducidad que figura en el envase. En caso de hipersensibilidad a algunos de sus componentes, no se debe consumir. Si se producen reacciones adversas, se debe suspender el tratamiento y consultar con un médico. Si los problemas persisten más de 7 días después del tratamiento, también se debe consultar con un médico. No se debe consumir si el estuche está abierto o dañado. En caso de embarazo o lactancia, se debe consultar con un médico antes de su uso.
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