La forma de administración de los gránulos es uno de los aspectos que más dudas genera, especialmente entre quienes se acercan por primera vez a este tipo de productos. Para ayudarte, te explicamos las pautas generales de utilización, siempre teniendo en cuenta que debes seguir las indicaciones del envase o del laboratorio y, ante cualquier duda, consultar con un profesional sanitario.
1. Se colocan bajo la lengua
La forma más habitual de tomarlos es dejando que los gránulos se disuelvan lentamente debajo de la lengua. Este método sublingual se ha utilizado tradicionalmente para favorecer la absorción.
2. Se recomienda tomarlos alejados de las comidas
Por norma general, se aconseja tomarlos al menos 15 minutos antes o después de las comidas, y evitando ingerir bebidas muy aromáticas (como café o menta) justo en el momento de la toma.
3. No se deben masticar
Los gránulos no deben triturarse ni masticarse, ya que su uso convencional consiste en permitir que se disuelvan por sí mismos.
4. Evitar tocarlos directamente
Muchos usuarios prefieren no manipularlos con las manos, utilizando directamente el dosificador que incorpora el tubo.
5. Seguir la posología recomendada
Cada laboratorio indica la cantidad de gránulos (o la periodicidad) adecuada para cada preparación. Cuando revises la ficha de producto en farmaciaribera.es, encontrarás siempre las instrucciones detalladas.
Este método de administración ha sido empleado durante décadas por quienes utilizan homeopatía en su rutina diaria, siendo un formato cómodo y fácil de adaptar.