De hecho, las varices pueden convertirse en úlceras al cabo de veinte ó veinticinco años; hemorragias, puesto que se rompen con facilidad y suponen la pérdida de sangre abundante en un tiempo mínimo y trombosis. El tratamiento de esta dolencia ha dado un paso de gigante con la incorporación a los medios de diagnóstico del doppler y los posteriores eco-doppler y dúplex, tres sistemas que funcionan por ultrasonidos, explicó el doctor Santos.
Los dos últimos, más actuales, han incorporado la imagen en color y permiten conocer mejor la raíz del problema y, por tanto, acudir a la terapia o a la cirugía con un diagnóstico certero. El facultativo resaltó que las varices “han existido siempre, pero son una patología que se ha agravado en la sociedad actual”.
Entre los factores que han contribuido al incremento del problema varicoso figuran la integración de la mujer al trabajo, sobre todo, en puestos laborales en los que se permanece sentada o de pie largo tiempo; el calor, con los nuevos sistemas de calefacción, y la mejora de la renta per cápita, que ha conllevado un aumento de la obesidad.
Otro de los factores es de carácter hormonal, ya que el uso de la píldora se ha extendido, las mujeres han comenzado a tomarla a edades más tempranas y, por tanto, la edad en la que aparecen las varices también se ha adelantado.
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