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Beneficios de los oligoelementos

3 febrero, 2020

Los oligoelementos son una serie de componentes químicos que resultan imprescindibles para el buen funcionamiento del organismo. Algunos de los oligoelementos esenciales son el potasio, el cloro, el zinc, el calcio y el hierro. A continuación señalaremos los principales beneficios de los oligoelementos.

Principales beneficios de los oligoelementos

La única forma de consumir los oligoelementos es por medio de la alimentación. Por eso es importante consumirlos de la manera adecuada y así aprovechar todos sus beneficios.1 Estos metales o metaloides pueden traer grandes beneficios para la salud. 

Rejuvenece la piel

El tratamiento con oligoelementos es conocido como oligoterapia. Esta terapia consiste en administrar dosis bajas de oligoelementos con distintos fines.5 De esta manera ellos se encargan de respaldar los procesos linfáticos del organismo. Así también ralentiza la oxidación celular consiguiendo que la piel luzca tersa y fresca. 

Por distintas enfermedades o hábitos de vida nuestra piel se puede ver afectada. El estrés, los nervios, la exposición al sol, el uso de cosméticos agresivos pueden ser unos de estos factores. Por eso el zinc, cobre, manganeso, el yodo o el selenio tienen distintos beneficios para la piel. Estimular el colágeno, reforzar la cicatrización, o la acción antioxidante son algunos de ellos.

Revitaliza tu cabello

El consumo de oligoelementos es fundamental para llevar una vida saludable y lucir bien. Así también, entre los beneficios de los oligoelementos se encuentra el de fortalecer y revitalizar el cabello. Ellos se encargan de colaborar en la formación de colágeno y elastina. 

Esto no sólo embellece y protege la piel, sino que además proporciona un cabello saludable y fuerte. Pues crea una barrera protectora contra distintos agentes externos como el sol o el humo de los carros. El cobre se encarga de regular la secreción sebácea. Esto previene el cabello grasoso y se encarga de evitar las canas. 

Y el magnesio ayuda a regenerar la piel. Gracias a él nuestro cuero cabelludo estará más protegido y sanará más rápido luego de cualquier lesión, lo que se resume en un cabello más sano.

Fortalecen los huesos y dientes

El flúor es el agente encargado de la salud de nuestros huesos y dientes. Consumirlo en las cantidades adecuadas ayuda a fijar el calcio en los huesos. Por eso, este oligoelemento es imprescindible en el periodo de crecimiento de los niños.9 

Sin embargo, también es vital para las personas mayores. Esto es porque, como el resto del organismo, los huesos se van debilitando con la edad y es necesario reforzarlos. Por otro lado, las cantidades adecuadas de flúor en el organismo traen grandes beneficios para la salud. 

Ayuda a prevenir y tratar la osteoporosis y otras enfermedades relacionadas con los huesos. Sin embargo, también entre los beneficios de los oligoelementos y del flúor se encuentran los estéticos. El flúor se encarga de mantener el esmalte de los dientes. De esta forma consigue que se vean bien y ayuda a prevenir la aparición de caries y otras enfermedades.

Son una fuente de energía

El yodo es un oligoelemento esencial porque es quien se encarga de que las glándulas tiroides funcionen correctamente. Estas glándulas funcionan gracias a unas hormonas llamadas hormonas tiroideas. Y el yodo es un oligoelemento imprescindible para la formación de estas hormonas. Ellas son esenciales porque regulan el metabolismo basal.4 

Al regular el metabolismo también se están encargando de las funciones y el crecimiento de otros sistemas del organismo. Entre las funciones de las hormonas tiroideas se encuentra la de proporcionar energía al cuerpo. Así mismo se encargan de sintetizar muchas proteínas. Por eso, si sientes cansancio o fatiga, si te parece que te falta energía, quizás no está consumiendo las cantidades adecuadas de yodo. Podemos conseguir yodo en el atún, los mariscos, el bacalao, la sal, los lácteos y los cereales.

Fortalecen el sistema inmune

Entre los oligoelementos esenciales para el organismo y sin el cual no podríamos vivir se encuentra el zinc. Este oligoelemento cumple la importantísima función de reforzar el sistema autoinmune.6 Es de vital importancia que este sistema se encuentre en óptimas condiciones. Porque gracias al sistema autoinmune es que nos sentimos bien. 

Él se encarga de reforzar nuestras defensas contra distintas enfermedades. Además, cuando está reforzado tenemos más energía y mejor ánimo para llevar a cabo las tareas cotidianas. El zinc lo podemos encontrar en las legumbres, la carne de cerdo, la levadura y las nueces. Las frutas sin embargo, no suelen tener dosis elevadas de zinc. 

Entre todos los beneficios de los oligoelementos aquí sólo hemos nombrado unos cuantos. Sin embargo hay muchos más de estos nutrientes esenciales sin los cuales no podemos vivir. Por eso es importante llevar una dieta balanceada que incluya las cantidades necesarias de oligoelementos para el cuerpo.

Referencias

  1. Ciudad Reynaud, A. (2014). Requerimiento de micronutrientes y oligoelementos. Revista Peruana de Ginecología y Obstetricia. Volumen 60 (2), 161-170. Recuperado de http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=323431582010
  2. Greenspan, S. Greenspan, F. (1999).  Effect of thyroid hormone on skeletal integrity. Ann. Intern. M. Volumen 81, 750–758.
  3. Martiáñez Rodríguez, J. Herrero Huerta, E. ( 2011). Oligoelementos y percepción sensorial. Nutrición Hospitalaria. Volumen 4 (2), 2-13
  4. Mosekilde, L.. Eriksen, E. Charles, P. (1990). Effects of thyroid hormones on bone and mineral metabolism. Endocrinol. Metab. Clin North. Volumen 130, 35–63.
  5. Ramírez Hernández, J. Bonete, M. Martínez-Espinosa, R. (2015). Propuesta de una nueva clasificación de los oligoelementos para su aplicación en nutrición, oligoterapia, y otras estrategias terapéuticas. Nutrición Hospitalaria. Volumen 31 (3), 1020-1033.
  6. Prasad A. (1991). Discovery of human zinc deficiency and studies in an experimental human model. Am J Clin Nuter. Volumen 53, 403-412.
  7. Rubio, C. González Weller, D. Martín-Izquierdo, R. Revert, C. Rodríguez, I. Hardisson, A. (2007). El zinc: oligoelemento esencial. Nutrición Hospitalaria. Volumen 22, (1), 101-107.
  8. Solomons ,N. Rusell, R. (1980). The interactions of vitamin A and zinc: implications for human nutrition. Am J Clin Nutr. Volumen 33, 2031-40.
  9. Unger, M. Chiappe, B. (2008) Importancia fisiológica de los microminerales en el metabolismo óseo. REDVET. Revista Electrónica de Veterinaria. Volumen 9 (10), 1-17. Recuperado de http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=63617098006